La luz de la iluminación puede estar compuesta de diferentes intensidades espectrales. Cuando el sol se encuentra cerca del horizonte por la tarde como una rodaja roja, predominan las ondas de longitud larga. Cuando el cielo esta encapotado por medio día en verano las ondas cortas son dominantes. Cuando la luz tiene diferentes intensidades espectrales, son diferentes tipos de luz. Es para decir que las intensidades de las ondas de la luz pueden ser muy diferentes. La luz del día puede presentar diferentes tipos de luz dependiendo del tiempo y de la posición del sol. Lo mismo sucede con la luz artificial. La luz de una bombilla eléctrica emite luz cálida, que es luz con predominancia de las longitudes de ondas largas. Una lámpara de Neón es al contrario y podría emitir luz fría, donde son predominantes las longitudes de onda corta. Entre los extremos de los tipos de luz existen todos los grados. La adaptación al color de la luz tiene la misión de reconocer siempre en forma óptima las diferencias entre los colores. Este hecho sucede para la adaptación de los diferentes conos de la retina que se ajustan al área del espectro a la que son sensibles.
La Adaptación al color de la Luz es la adecuación del Organo de la Vista a la composición espectral del tipo de luz.