Después de leer este artículo muchos podréis decir: ¿y ahora como aplico yo todo esto?
Creo que el conocimiento de la teoría del color nos ayuda a comprender y nos incita a experimentar. Por supuesto que no se trata de comprar solo cuatro o cinco botes de pintura y a partir de aquí pintar todo lo que se nos ponga a tiro. Toda la gama de colores que pone a nuestra disposición el mercado es absolutamente aprovechable. Lo interesante es tener los conocimientos suficientes para sacar el máximo partido a nuestra paleta y poder resolver con cierta suficiencia los dilemas cromáticos que nos surgen al pintar una figura. Asimilar esto no nos garantiza unos buenos resultados; hay otros factores implicados para la obtención de acabados óptimos, como la propia habilidad y la destreza.